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El cuarzo rutilado, también conocido como cabellos de Venus, es una variedad de cuarzo (silicato) que contiene agujas de rutilo (óxido de titanio). Los cristales de rutilo pueden ser de color dorado, rojo o negro, dependiendo de la concentración de hierro. A veces también pueden apreciarse otras agujas, como las de turmalina negra o las de clorita verde. Se encuentra en pegmatitas, en rocas sedimentarias y en grietas alpinas.
La mayoría de los yacimientos de cuarzo rutilado se encuentran en Brasil. Normalmente aparece en forma de cristales y suele pulirse en forma de cabujón con el fin de ser usado para la elaboración de joyería.
Yacimientos:�Brasil, Estados Unidos, Austria, Australia, México, Rusia, Bélgica y Madagascar.
El cuarzo citrino es una variedad de cuarzo cristalino de color amarillo. Su color se debe a la presencia de óxido de hierro hidratado. Forma cristales hexagonales y normalmente se encuentra en pegmatitas y en filones hidrotermales. Su nombre proviene del latín “citrinus”, en referencia a su color. Al ser un cuarzo más escaso que otros tipos de cuarzo, a veces se utilizan la amatista y el cuarzo ahumado tratados con calor para conseguir un cuarzo citrino parecido al natural.
Yacimientos:�Brasil, India, Rusia, Estados Unidos, Gran Betaña, Madagascar, Francia y Alemania.
