El ojo de buey tiene una energía muy especial y poderosa que fundamentalmente nos puede ayudar a perseverar cuando nuestra fuerza de voluntad flaquea.
Ideal para cuando estamos intentando cambiar algo en nosotros o en nuestra vida y no nos sentimos capaces de conseguirlo.
Es un cristal ideal para reforzar la fuerza de voluntad y para ayudarnos a admitir nuestras responsabilidades.